Ignifugaciones de estructura metálica: Tipos de resistencia al fuego.
La resistencia al fuego es la capacidad que posee un elemento para mantener durante determinado periodo de tiempo la función portante que le sea exigible, así como la integridad o aislamiento térmico de los términos específicos para las actividades que se asignen.
Capacidad real R: durante un tiempo X sin perder ninguna estabilidad estructural durante la exposición al fuego en una o unas trayectorias del fuego, bajo acciones mecánicas y movimientos.
Capacidad portante R30
No podrá ser menor de la estructura de edificio tipo vivienda unifamiliares, pero excepto casos de edificios que se encuentre bajo cubierta, el edificio no prevista para evacuación y cuyo fallo no suponga ningún riesgo para la estabilidad de otras plantas sin superar los 15 metros de altura.
Capacidad portante R60
Residencial Público, Docente, Administrativo en estos tipos de resistencia se suelen utilizar capacidad portante R60. Los edificios no superan más que los 15 metros de altura.
Capacidad portante R90
Este tipo de resistencia normalmente se usa en Docente, Residencial Público, Administrativo o en áreas residenciales que son menores de 28 metros de altura. Además de comerciales, pública concurrencia y hospitales que no deben superar más que los 15 metros de altura.
Capacidad portante R120
Este tipo de resistencia normalmente se usa en áreas residenciales, Residencial Público, Docente, Administrativo con altura de los 28 metros, pero no más. Comerciales, pública concurrencia, y construcciones hospitalarias que no deben superar más que los 28 metros de altura.
Capacidad portante R180
Cuándo altura de edificio tiene 28 metros hace falta obtener un R180, además
R180 se utiliza en aparcamientos robotizados. También en comerciales, pública concurrencia, y construcciones hospitalarias.
Primer Método: El mortero ignífugo
El mortero ignífugo es un método que se coloca de formas: como mecánica o como forma manual, primero usando una malla de protección obligatoriamente asegurando la adhesión del mortero que debe ser protegido. El mortero ignífugo fue diseñado con base compuestos formados a su vez por dos minerales bastante ligeros como: la vermiculita y la perlita. Además la formulación fue creada especialmente para concederle a las estructuras de metal una alta resistencia protegida contra el fuego depende de los espesores que se empleen
Mortero ignífugo en base yeso, resistente al fuego, con propiedades de aislamiento térmico para la protección pasiva contra incendios en elementos estructurales y compartimentación. La forma correcta de proteger los edificios.
Sobre las ventajas más resaltantes usando el método:
-El efecto más grande que proporciona
-Aplicación de método más fácil que puede ser
-Las dos posibilidades de aplicación como manual o mecánica.
Lo bueno es que el mortero ignífugo desprende vapor de agua sin ninguna otra substancia peligrosa para la vida de las personas.
Sobre desventajas del Mortero ignífugo:
El mortero se usa en forma húmeda realizando con máquina de proyección tipo mezcladora y compresor.
Con el tiempo largo el mortero puede desaparecer en zonas pequeñas dejando un aspecto visual.
El mortero no es el único método para hacer ignifugaciones en edificios y vida humana. Además este método el mortero ignífugo siendo la solución más eficaz (con la Pintura Intumescente). Pero antes de empezar a proteger el edificio, el maestro debe realizar una revisión para elegir el mejor método para la construcción. La aplicación normalmente se suele llevar a cabo sobre una malla de metal que hace más fácilmente agregar el mortero al soporte.
¿Cuál es el Mortero que usamos en Promatec?
Nuestra respuesta es PERLIFOC. Es uno de los sistemas más populares de creación y aplicación de morteros ignífugos para tratamiento de edificios más conocidos en el mercado. Ofreciendo una velocidad de reacción al fuego grado M0 (A1), con una resistencia a un chorro UNE 23 – 806 – 81, cumpliendo así con la normativa vigente y ofreciendo un altísimo nivel de seguridad contra incendios. El método es ideal para proteger la vida humana y cualquier tipo de viviendas o edificaciones industriales.
El acero existente en las vigas debe ser revestido. Esto se puede hacer dando una capa primero de imprimación anticorrosiva, este paso no es obligatorio, pero sí bastante aconsejable. Luego se recomienda la aplicación del revestimiento PERLIFOC cuya variación se encuentra dependiendo del espesor del modelo elegido según el factor de forma EF.
Para el resto de elementos de construcción ubicados o utilizados en los edificios que no son vigas u otros materiales de vigas, de forma complementaria. Es recomendable el uso de espumas y pinturas intumescentes y a su vez otro tipo de morteros y pinturas de protección ignífugas. Cada paso debe ser realizado con atención alta. Dicho lo anterior, para trabajar grietas, roturas y asegurar la protección de algunas zonas donde se utilizarían masillas así como también selladores y gomas o protectores especiales para los cables. Este paso no tiene menos importancia como los anteriores.
Segundo Método: La Pintura Intumescente
Este tipo de pintura tiene un objetivo – es crear una capa de protección cuyo efecto producido es una efervescencia aislante impidiendo así que superficies recubiertas alcancen altas temperaturas. Para que te lo entiendas bien , la pintura intumescente hace como un airbag, se expande para que el fuego no llegue a la viga. El tiempo de llegar a la viga se suele medir en minutos y normalmente se certifica en: 15, 30, 60, 90, 120 y 180 minutos.
Debe aplicarse de forma manual con un rodillo, en zonas pequeñas, o máquinas de pulverización o pistolas , en superficies de mayor envergadura. Es una capa lisa y fina de aspecto estucado que seca dentro de 4 a 6 horas aproximadamente. Tiene color blanco, pero puede ser pintado encima con un esmalte ignífugo. Además es muy recomendable aplicar una imprimación anticorrosiva.
La pintura intumescente realiza una especie de airbag cuando el fuego conecta con esta pintura y se expande y no deja llegar el fuego hasta el metal. Lo importante eligiendo una pintura perfecta no es el precio, sino la calidad que puede proteger tanto la vida de la persona como el edificio donde están las personas. Además la pintura debe ser aprobada por un inspector por eso la calidad no debe ser mala. Buena pintura te ayuda no solo proteger la vida humana que es el primer objetivo sino ayuda a ahorrar y no repetir la renovación del edificio. Otro punto no menos importante es la certificación.