A eso de las cinco de la mañana del domingo, se desató un incendio en la cocina de un hotel en Los Cristianos, en el sur de Tenerife. Todo empezó por una freidora, según fuentes oficiales. Al lugar llegaron rápidamente bomberos del parque de San Miguel y voluntarios de Adeje, alertados por el 112. La policía local y el personal sanitario también acudieron, aunque por suerte no hubo que lamentar heridos.
Sistemas de protección en entredicho
Aunque el fuego se apagó rápido, volvió a requerirse intervención a las siete de la mañana por una acumulación de humo en el sistema de extracción. Este tipo de sucesos reabre el debate sobre si los espacios hoteleros están correctamente equipados con ignifugaciones actualizadas. No es la primera vez que un incidente de este tipo evidencia ciertas carencias en la prevención de incendios en instalaciones turísticas.
Seguridad garantizada con certificado
Contar con un certificado de ignifugación es obligatorio y clave para evitar riesgos mayores. De nada sirve apagar un incendio si los materiales del edificio no cumplen con las normativas. Este certificado acredita que las superficies tratadas tienen resistencia al fuego, reduciendo así el peligro de propagación. Lo ocurrido en este hotel debería servir como recordatorio de que la seguridad no puede quedar en segundo plano.
Más allá del fuego: accidentes y rescates
Durante el mismo fin de semana, los bomberos también respondieron a otros sucesos. En Arico, rescataron a una persona atrapada bajo una puerta, y en San Miguel de Abona atendieron un accidente de tráfico en la TF-65, donde una conductora tuvo que ser evacuada desde la parte trasera del vehículo. Además, en Tacoronte, un coche cayó por un barranco y hubo que controlar el derrame de combustible. Fin de semana movido.
