Un extintor de incendios es una de las herramientas más eficaces para combatir un fuego en sus primeras etapas. Sin embargo, no basta con tenerlo cerca: lo esencial es saber utilizarlo correctamente para evitar que un pequeño foco se convierta en una catástrofe. En este artículo explicamos con detalle el método internacional P.A.S.S. (Pull, Aim, Squeeze, Sweep), los diferentes tipos de extintores disponibles en el mercado, consejos de seguridad y la relevancia de la venta de extintores certificados para hogares, oficinas y empresas.
Tipos de extintores y su uso adecuado según el fuego
Antes de accionar un extintor, debemos tener claro que cada tipo está diseñado para un material combustible específico. Usar el modelo equivocado no solo puede ser ineficaz, sino también peligroso.
- Extintores de agua a presión: recomendados para fuegos de clase A, como madera, cartón, papel o telas.
- Extintores de espuma: funcionan bien en incendios de tipo A y B, especialmente líquidos inflamables como gasolina o aceite.
- Extintores de polvo ABC: los más versátiles y comunes, ya que sirven para fuegos sólidos, líquidos y gaseosos.
- Extintores de CO₂: indicados para incendios eléctricos y líquidos inflamables, porque no dejan residuos.
- Extintores de clase F: especializados en aceites y grasas de cocina, esenciales en restaurantes o cocinas industriales.
Conocer la clasificación de cada extintor permite actuar con precisión y rapidez.
Método P.A.S.S.: la técnica internacional para usar un extintor
La manera más segura y reconocida a nivel mundial de emplear un extintor es siguiendo las siglas P.A.S.S.:
- Pull (Tira): retirar la anilla de seguridad que bloquea la palanca.
- Aim (Apunta): dirigir la boquilla hacia la base del fuego, nunca al humo.
- Squeeze (Presiona): apretar con fuerza la manija de manera continua.
- Sweep (Barre): realizar un movimiento lateral cubriendo toda la base hasta extinguir las llamas.
Este procedimiento es sencillo de recordar, pero requiere práctica para aplicarlo de manera automática en una situación real.
La importancia de la venta de extintores certificados
En muchos hogares y empresas, el error comienza desde el inicio: no contar con un extintor certificado y en condiciones óptimas. La venta de extintores de calidad garantiza que el equipo tenga la presión adecuada, fecha de caducidad vigente y capacidad real de funcionar en caso de emergencia.
Adquirir un extintor en sitios no autorizados puede implicar que el dispositivo no cumpla normativas de seguridad, poniendo en riesgo vidas y bienes materiales. Por ello, lo recomendable es comprar extintores en distribuidores autorizados, que además brinden servicio de recarga y mantenimiento.
Dónde comprar extintor con confianza y garantía
Cuando pensamos en comprar extintor, debemos priorizar tres aspectos:
- Certificación oficial: comprobar que el producto cumpla normativas internacionales.
- Asesoría especializada: recibir orientación sobre el tipo de extintor adecuado según el entorno (hogar, cocina, oficina, almacén).
- Mantenimiento posterior: garantizar la posibilidad de revisiones periódicas y recarga.
Invertir en un extintor confiable no es un gasto, sino una inversión en seguridad que puede salvar vidas y evitar pérdidas materiales significativas.
Altura señal extintor y señalización adecuada
Tan importante como contar con un extintor es saber dónde localizarlo rápidamente en caso de emergencia. La normativa indica que la altura señal extintor debe colocarse a una medida visible, generalmente a 2 metros del suelo, para que pueda identificarse incluso en espacios concurridos o con humo.
La señalización debe ser clara, con pictogramas reconocibles, y colocada en zonas visibles como pasillos, entradas y áreas de riesgo. Asimismo, el extintor debe estar libre de obstáculos y ubicado cerca de salidas de evacuación.
Medidas de seguridad antes, durante y después del uso de un extintor
Antes:
- Evaluar el tamaño del fuego: solo intentar apagarlo si es controlable.
- Mantener siempre una vía de escape libre.
- Revisar la presión y estado del extintor.
Durante:
- Colocarse a una distancia de 1,5 a 2 metros de las llamas.
- Apuntar siempre a la base del fuego.
- Evitar inhalar humo o sustancias químicas.
Después:
- Vigilar la zona para asegurarse de que el fuego no se reactive.
- Reportar inmediatamente el uso para recargar o sustituir el extintor.
- Evitar manipular aparatos eléctricos dañados hasta que un técnico los revise.
Errores frecuentes al utilizar un extintor
Aunque el procedimiento es claro, es común que se cometan errores como:
- Dirigir el chorro hacia el humo en lugar de la base.
- No retirar el pasador de seguridad antes de accionar.
- Colocarse demasiado cerca del fuego.
- Usar un equipo caducado o descargado.
- Intentar apagar incendios demasiado grandes, cuando lo más seguro es evacuar.
La capacitación en colegios, oficinas y fábricas: un paso vital
En espacios públicos y privados es indispensable realizar simulacros periódicos para que las personas se familiaricen con el uso del extintor. Estas prácticas generan confianza, reducen los nervios en situaciones de emergencia y aumentan la probabilidad de éxito en la extinción de un fuego.
Los simulacros deben incluir:
- Demostraciones prácticas con personal capacitado.
- Videos explicativos.
- Cartelería con el método P.A.S.S. en lugares estratégicos.
El extintor como aliado para salvar vidas
El extintor es mucho más que un accesorio obligatorio: es una herramienta vital para la protección de vidas y bienes. No basta con instalarlo; es fundamental saber utilizarlo, colocarlo a la altura señalizada y adquirirlo únicamente en puntos de venta de extintores certificados. Además, recordar que comprar extintor adecuado según el entorno y capacitar al personal en su uso puede marcar la diferencia entre una emergencia controlada y una tragedia.
Con entrenamiento, mantenimiento periódico y señalización visible, todos podemos estar mejor preparados para actuar en caso de incendio.
